¿INTELIGENCIA EMOCIONAL?

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JUEGO DE INTELIGENCIA EMOCIONAL

La inteligencia emocional es la capacidad de:

1. Conocerte en todas tus etapas, formas y emociones.

Conocerte significa entender cómo piensas, sientes y cambias con el tiempo. A veces estás feliz, otras enojado o triste, y eso está bien. Por ejemplo, si te molesta perder un partido, reconocerlo te ayuda a mejorar tu reacción. Conocerse es el primer paso para crecer.

2. Aceptarte tal cual eres, con tus fortalezas y tus debilidades

Aceptar quién eres es saber que todos tenemos cosas buenas y cosas por mejorar. Tal vez eres buenísimo dibujando pero te cuesta matemáticas. No se trata de ser perfecto, sino de valorar lo que haces bien y tener paciencia contigo mismo cuando algo no sale tan fácil.

3. Trabajar en tu autoestima

La autoestima es cómo te sientes contigo mismo. Si crees que vales, que puedes aprender y mejorar, tu autoestima crece. Por ejemplo, si fallas un examen pero decides estudiar más para el siguiente, estás cuidando tu autoestima en lugar de rendirte o hablarte mal.

4. Motivarte en tus metas

Tener metas es como tener un mapa. La motivación es lo que te empuja a seguir aunque haya obstáculos. Si tu meta es aprender guitarra, practicar todos los días, aunque te equivoques, es motivarte. Recordar por qué empezaste te ayuda a no rendirte.

5. Dominar las habilidades sociales 

Dominar las habilidades sociales dentro de la inteligencia emocional" significa saber cómo llevarte bien con los demás. Es entender tus propios sentimientos y los de otras personas para poder comunicarte mejor, resolver problemas y trabajar en equipo. Es como ser un buen amigo y compañero, que puede hacer sentir cómodos a los demás y manejar situaciones difíciles con calma.

INTELIGENCIAS MULTIPLES 

Por otra parte, en la actualidad la inteligencia no se concibe como una única capacidad medible a través de un coeficiente intelectual (IQ), como se pensaba tradicionalmente. En cambio, se han desarrollado nuevas perspectivas que amplían esta visión. Howard Gardner, por ejemplo, propuso la teoría de las inteligencias múltiples, la cual plantea que los seres humanos poseen diferentes tipos de inteligencia —como la lingüística, lógico-matemática, musical, interpersonal, entre otras—, y que cada persona las desarrolla en función de sus intereses, talentos y entorno.

Complementariamente, Daniel Goleman introdujo el concepto de inteligencia emocional, afirmando que:
"Cuando se trata de dar forma a nuestras decisiones y acciones importantes, sentimos mucho más de lo que pensamos" (Goleman, 1995, p. 4).
Esto resalta el papel fundamental que juegan las emociones en nuestra vida diaria. Según Goleman, competencias como la autoconciencia, la autorregulación, la motivación, la empatía y las habilidades sociales son tan determinantes como las capacidades cognitivas para el éxito personal y profesional.